Propósitos de fin de año (II)





Propósitos de fin de año (II)
¡Cómo crecen!
Ayer me reuní con mis dos mejores amigas: Claudia y Rossana. Nos conocemos tanto, que por momentos tengo la extraña sensación de tener enfrente una proyección de mí misma, pero con todo lo bueno de ser evidentemente diferentes. Hacía tiempo que no teníamos un rato para conversar y, aunque con los pequeños dando vueltas por ahí, no se hace del todo fácil concentrarse en la charla, pudimos re-encontrarnos después de unos cuantos meses. Estamos tan inmersas en lo nuestro que no coincidimos en momentos para reunirnos o cuando los tenemos, estamos demasiado cansadas. Claudia y yo trabajamos juntas, en consecuencia, nos vemos por lo menos tres veces por semana, siempre pensando cómo y cuándo, armando presupuestos, planificando, organizando, haciendo. Es verdad, lo disfrutamos mucho y nos divertimos en el proceso, pero estamos trabajando.  Con Ro es más complicado, trabaja en un colegio y tiene su consultorio de estética. Además de un hijo adolescente que practica todos los deportes que una se pueda imaginar -lo que se hereda...- y al cual acompaña a sol y sombra. Resultado: agenda completa. Por eso disfruto ahora más que nunca de los momentos de estar juntas. Ellas son "los testigos": esas personas que conocen toda tu vida, incluso lo que te avergüenza, lo que no querés recordar. Mi segundo propósito de fin de año tiene que ver con mis testigos, con mis seres queridos, con mi sobrinita por venir...Quiero darme tiempo para disfrutarlos para no renunciar a compartir la vida cotidiana. Sé que es un lugar común, pero lo escribo para no olvidarme. Porque ahora, sumo testigos...