Cómo trazar un plan de visibilidad infalible

Cómo trazar un plan de visibilidad infalible



Yo soy visible. Tu sos visible. Nosotros somos visibles. Como tengo uno de esos días de visión reflexiva quiero hacerte una pregunta: ¿a qué estás llamando "visibilidad"? Vayamos paso a paso para que decidas hasta qué punto estás de acuerdo con trazar un plan que sea tu carta de navegación para acercarte a la visibilidad deseada.

Ser visible.


Exponerse para la WWW es un acción difícil de procesar :¿Cómo que me van a leer mis compañeros de trabajo? ¡Me muero si mi vecina se entera que escribo un blog! 

La visibilidad es una aspiración ambigua porque la ambición es una de las malas palabras de la educación latina.  Reclamar un espacio para tu opinión supone un gesto de posicionamiento del ego que se mira con desdén entre los que hablamos lenguas romance. 

De alguna forma, el posicionamiento online se confunde con la pretensión de posicionamiento del ego. Como si elegir escribir y compartir lo que te apasiona fuese un gesto de orgullo. Por eso, la mayoría no le cuenta que escribe y confían en el milagro de la visibilidad. Y si no, no pasa nada. Nadie se enteró. No sea cosa que fracases. Te canses y abandones. Te aburras. Decidas dejarlo y empezar otra cosa.

Qué problema tenemos con las personas que toman decisiones de cambio. Hay preguntas que me llevan la vida pero, la que realmente me gustaría que me respondas es ¿por qué sentir culpa de querer cosas distintas en distintos momentos de tu vida? O a veces en el mismo. 

El multiapasionamiento es una anomalía del carácter en un mundo que privilegia que sostengas un compromiso que no te hace feliz, un trabajo que te aliena, una vida con la que no sentís ninguna conexión. No sos anómala. Pero si te interesa ser visible, exige compromiso.

¿Ya te comenté que esto venía de reflexión?


Para que comiences a trazar tu plan de visibilidad, tendrías que aceptar dejar el caparazón. Digamos que son excepcionales los casos en los que un blog es visible independientemente de quien lo escribe. Muy excepcionales. 

Si hoy empezaste a escribir, que lo sepa todo el mundo. Si mañana te aburre, habrás encontrado algo mejor a qué dedicar tu tiempo. Y esa decisión te concierne única y exclusivamente. No es un fracaso, es un paso hacia el auto-conocimiento que, en última instancia, es una forma genuina y valiosa de saber.

Si sos una lectora desmesurada, sabrás que no me canso de repetir que la única diferencia entre un blog que funciona y uno que no, es la persona que lo escribe. Consolidar tu compromiso significa asumir que tener un blog visible, significa hacerte visible. Pero, si ya te decidiste, ¿cómo? A eso vamos.

Plan paso a paso para la visibilidad.


Todo empieza con una idea. Un proyecto que te mantiene despierta durante las noches y te invita a soñar despierta. ¿Ya tuviste esa idea? ¿Ya pasaste alguna nochecita en blanco? Dándole vueltas y vueltas a un plan que desconocemos cómo materializar pero que necesitamos hacer visible para que funcione y genere ingresos. En ese caso, urge hacerlo visible. Posicionarte en una comunidad de lectores. Quiero compartir contigo un plan simple de seis pasos.

Primer paso: En el principio era el blog.


En este momento, estás escribiendo entre tus pendientes: crear un blog preparado para la visibilidad. Porque estar preparada para la visibilidad significa mucho más que elegir una plantilla y pelearte con Mailchimp.

Segundo paso: A mover el bote.


Al terminar de escribir un post, solo hiciste un cuarto de tu trabajo. Después del tiempo dedicado a escribir y editar, llega el momento de promocionar. Nunca te estás moviendo demasiado. 

Tercer paso: Comunicarte.


Si no te gusta interactuar, comunicarte, leer y comentar, tengo una sugerencia. Elegí otra forma de hacer visible tu idea. Siendo anónima y además, muda, dudo que logres tu objetivo.

Cuarto paso: Hacer lo que te incomoda.


¿Por qué? Porque es precisamente lo que menos personas se animan a hacer y, por lo tanto, lo que te ofrece más posibilidades de ser visible. Si te pone de los nervios pensar en un video... tomate unas semanas para procesarlo y después a crear videos. Si te dicen "webinar" y te recorre la espalda un sudor frío... es un webinar tu próximo paso.

Quinto paso: Pensá en experiencias para tus lectores.


En las redes están tus lectores.  A las redes vas a ir a buscarlos. ¿Cómo? ¿Pensabas quedarte sentadita esperando que llegaran? Espere sentada, decía mi abuela María. Porque salvo que pagues por la visibilidad, "esperando sentada" lo único que se consigue es unos glúteos dormidos. 

¿Te decidiste? ¿Vas a ir a buscarlos? Ahora viene la parte B de este plan: cuando los encuentres ¿qué les vas a proponer? No me digas nada: que lean tu post. Cuando estés desesperada preguntándote por qué nadie entra en tus publicaciones, no me digas que no te avisé: la audiencia de las redes sociales no quiere lectura, quiere experiencias. 

Sexto paso: No es contenido... es conocimiento.


Publicar al azar no es un plan. El blog es para disfrutarlo pero si estás creando tu plan de visibilidad te propongo escuchar lo que dicen los lectores y escribir sobre esos temas. Con tu estilo personal y sin perder la naturalidad porque un post zombie no es lo que te interesa compartir con la comunidad.

Así como quien no quiere la cosa, siguiendo un esquema ordenado, en seis meses es posible formar tu propia comunidad. La que te permite seguir teniendo lectores aunque tu blog sea devorado por el buscador de los buscadores. Conozco una chica a la que le pasó eso... ¡ah! Era yo.

Si te encuentro de visita, no olvides contarme qué estrategia es la que mejor te funcionó para hacer visible tu blog o cuál es la que podrías implementar en esta misma semana para obtener un plan de visibilidad infalible.